La higiene es un concepto que conforma a su vez un factor importante de la salud de las personas. Por ello y de manera general empezaremos por definir este concepto que como bien dice la RAE (2019) hace referencia a la “parte de la medicina que tiene por objeto la conservación de la salud y prevención de enfermedades” Por lo tanto, podemos decir que la higiene se conforma por todas las acciones que influyen de manera positiva en la salud de las personas (Lizandra, 2016).
La higiene está presente en todos los momentos de nuestro día y en cualquiera de los contextos. Pero especialmente, nos vamos a centrar en la higiene en el primer ciclo de la educación infantil.
En este momento entra en juego el papel que desempeña la familia como primer agente educativo. Pudiendo decir que la familia es una unidad ecosistémica, es decir, un espacio cotidiano donde se establecen redes de apoyo, confianza, mutualidad y solidaridad (Estupiñán y Hérnandez, 2007; Muaze, 2016). Por tanto, se trata de una fuente formativa primaria, que se encarga de proteger, cuidar, formar y humanizar (Lizandra, 2016).
Una vez que los niños/as van creciendo, dejan de pasar tanto tiempo con su familia para pasarlo en otros contextos, por lo que deben ir aprendiendo hábitos de higiene autónomos.
Según Pikler, el cuidado se trata de una confluencia que ofrece al niño una relación y unos cuidados de calidad y la posibilidad de ejercer su actividad autónoma, amparada y valorizada por el adulto, en un ambiente de seguridad.
Cuando los niños/as son muy pequeños y no pueden valerse por sí mismos, necesitan un cuidado y atención constante. Requieren de un adulto para lavarse, cambiarse, asearse. etc.
Uno de estos momentos de higiene es el del cambio de pañal, en este momento es muy importante la relación del niño/a con el adulto, debemos pensar en lo que necesita el niño/a en cada momento. Será necesario utilizar un lenguaje cercano, respetuoso y afable, también hay que anticipar y siempre darle una explicación sobre qué hacemos y por qué lo realizamos (Luna E. I., 2020).
A medida que los niños/as crecen, se van incorporando al siguiente agente educador después de la familia, la escuela. Es necesario que exista una coordinación entre estos dos contextos para el correcto desarrollo de los alumnos.
En este contexto, los niños/as van siendo cada vez más autónomos, y a partir de dos años (dependiendo del ritmo de cada niño) son capaces de lavarse las manos, los dientes, bañarse, ir al baño solos, limpiarse, etc.
Como se ha mencionado en el párrafo anterior, en la Educación Infantil, en el primer ciclo, es decir los alumnos de 0-3 años,, van siendo más autónomos, ya que uno de los objetivos de la etapa 0-3 años es “adquirir progresivamente autonomía en las actividades habituales”. En concreto, nos vamos a centrar en los objetivos específicos sobre la higiene, de los cuales podemos destacar los siguientes (Santiago; Arribas, 2016):
- Fomentar un correcto hábito de higiene personal.
- Hacer que el niño participe de manera placentera en su propia higiene.
- Incrementar la autonomía de su higiene personal.
- Iniciarse en el cuidado de objetos personales relacionados con la higiene.
Para terminar, nos gustaría hablar sobre la importancia que tiene hoy en día la higiene. La pandemia que atravesamos, nos obliga a ser más estrictos con la higiene, debemos concienciar a los niños/as de la importancia de lavarse las manos con jabón, de no abusar del gel hidroalcohólico, y de no tocar cosas ni llevarse nada a la boca.
En lo que concierne a la higiene y el coronavirus, la OMS (2020), pone de manifiesto las siguientes indicaciones sobre las medidas recomendadas para la apertura de las escuelas, donde se establecen los nuevos hábitos de higiene que hemos de afrontar cada día:
- La importancia de la higiene y limpieza del entorno para limitar la exposición al virus.
- Informar y concienciar acerca de la importancia del lavado de manos, la higiene respiratoria, la obligatoriedad o no de las mascarillas, las cuales se deberán de proporcionar a todo aquel que lo necesite.
- Por último, se ha de crear un horario para el lavado frecuente de manos, dejando a disposición de la comunidad educativa, gel hidroalcohólico o jabón, así como agua limpia en las instalaciones escolares.
Referencias
Luna, E. I. (2020). El momento del cambio de pañal. Aula de Infantil, 13-15.
Rodríguez, Y. S., & Peñalver, I. A. (2016). Autonomía personal y salud infantil. Madrid: EDITORIAL SÍNTESIS, S. A.
Moreno-Acero, I, Leyva-Townsend, P., y Parra-Moreno, C. (2019). La familia, primer ámbito de educación cívica. Civili-zar: Ciencias Sociales y Humanas, 19(37), 43-54. doi: 10.22518/usergioa/jour/ccsh/2019.2/a26. Recuperado de: https://revistas.usergioarboleda.edu.co/index.php/ccsh/article/view/V19n37a06/1194
Lizandra, A. (2016). La higiene en educación infantil. Los talleres como recurso didáctico (p.4). Universitat Jaume I. Recuperado de http://repositori.uji.es/xmlui/bitstream/handle/10234/162225/TFG__Lizandra_Mac%C3%ADas%2c_Alba.pdf?sequence=1&isAllowed=y
OMS (2020). Consideraciones para las medidas de salud pública relativas a las escuelas en el contexto de la COVID-19. Recuperado el 18-11-2020 de https://apps.who.int/iris/bitstream/handle/10665/332107/WHO-2019-nCoV-Adjusting_PH_measures-Schools-2020.1-spa.pdf?sequence=1&isAllowed=y
Real Academia Española (2019). Definición higiene. Recuperado el 18-11-2020 de https://dle.rae.es/higiene
Sheila Hormachea, Coral Sánchez y Carmen Santos, 2020.